Las pasadas elecciones a las Cortes de Castilla y León fueron las primeras en las que el presidente de la comunidad autónoma emplearía la prerrogativa de convocar elecciones anticipadas, separándose así Castilla y León del ciclo electoral autonómico común. De esta forma, las elecciones celebradas el 13 de febrero de 2022 constituyeron una nueva lógica electoral.

El presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco (Partido Popular, PP), convocaría estos comicios tras una complicada y turbulenta legislatura que no sólo vendría marcada por la crisis sanitaria del COVID-19 sino también por la crisis del partido con el cual compartían la Junta de Castilla y León (Ciudadanos, C´s). En Castilla y León, tras el convulso escenario que deja la moción de censura en la Región de Murcia, así como en la ciudad de Murcia, que lleva a la presidenta madrileña a la expulsión de C´s del gobierno de Madrid y al adelanto electoral; el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) presenta una moción de censura. Esta moción no saldrá adelante, pero derivará en una inestabilidad tras el transfuguismo de diputados de C´s que obliga al PP a buscar apoyos alternativos (Por Ávila). Ante este escenario, Fernández Mañueco anuncia la expulsión de C´s del gobierno autonómico y anuncia el adelanto electoral.

A pesar de esa turbulenta relación entre PP y C´s, y del fracaso del líder socialista en la moción de censura; el protagonista de la jornada electoral del 13 de febrero de 2022 sería otra formación. Vox se situaría como la tercera fuerza en el parlamento de Castilla y León, pasando de 1 a 13 diputados y aumentando en más de 130.000 votos. Frente a la pérdida de 7 representantes por parte del PSOE, el PP lograba 2 escaños más (a pesar de perder más de 50.000 respecto 2019, siendo su peor resultado histórico). Así pues, los populares precisarían de apoyos para volver a presidir la Junta de Andalucía. Y es que, en la propia noche electoral, los de Abascal ya se presentaban como parte de ese futuro gobierno. Tras muchas idas y venidas, finalmente Fernández Mañueco anunciaba el acuerdo de gobierno PP-Vox.

Ante el complejo escenario político vivido en Castilla y León en los últimos años nos preguntamos cuáles son los factores que explican ese exponencial crecimiento de Vox en la comunidad autónoma que se convertiría en la primera que cuenta con la formación de extrema derecha en su gobierno. Si bien las elecciones en Andalucía en 2018 supusieron un punto de inflexión en tanto a que se tradujeron en el primer parlamento del Estado español con miembros de la formación entre sus diputados, las elecciones en Castilla y León suponen un nuevo hito para Vox al suponer el pasaje a formar gobierno por primera vez. En este sentido, como ya hemos comprobado (Jaráiz et al., 2020; Rivera et al., 2021; Vicente et al., 2021; Castro y Jaráiz, 2022; Lagares et al., 2022; Oñate et al., 2022), destacamos la relevancia de contar con las variables emocionales a la hora de analizar el fenómeno político que constituye la extrema derecha en España. De este modo, en este paper buscamos identificar los elementos que explican los resultados de estas elecciones en Castilla y León y, en particular, los factores explicativos tras el importante aumento de apoyo a la formación de extrema derecha. Ponemos, eso sí, el foco en el papel que las emociones pueden tener en esta explicación. Para ello, emplearemos en nuestro análisis un estudio llevado a cabo por el Equipo de Investigaciones Políticas de la Universidad de Santiago de Compostela (EIP-USC).