El constante cambio en el panorama de seguridad global marcado por un incremento del uso de la tecnología tanto por criminales como por el Estado, así como por su impacto en los escenarios de seguridad. exige una evolución permanente de las estructuras de inteligencia estatales. Las múltiples transformaciones y estrategias adoptadas a lo largo de los años han explorado un amplio espectro de la Teoría Organizacional, desde la centralización hasta la descentralización, la creación de agencias especializadas y entes coordinadores, llegando incluso a la contratación de servicios de inteligencia del ámbito privado. No obstante, estas estrategias parecen insuficientes frente a dos desafíos emergentes que evidencian la disolución del control estatal sobre la inteligencia: la emergencia de nuevos actores con acceso a masivos volúmenes de información y el papel crucial de la tecnología en las operaciones de inteligencia.
Este paper expone cómo la Teoría de los Ecosistemas podría contribuir a repensar la reforma de las agencias de inteligencia para que cumplan con las necesidades de los estados. La capacidad de los sistemas de inteligencia de naciones pequeñas y medianas no alcanza para enfrentar estos desafíos adecuadamente. Por eso, este enfoque innovador fomentaría esquemas colaborativos de inteligencia, especialmente en el marco de la Unión Europea. Este estudio se enfoca en: i) las estrategias que históricamente han aplicado los servicios de inteligencia para adaptarse, y ii) los componentes de un ecosistema de inteligencia y cómo estos podrían satisfacer las demandas actuales de la inteligencia gubernamental.