Un argumento recurrente en la literatura académica es que la sociedad española se encuentra muy polarizada ideológicamente, medida en términos de la ubicación en la escala izquierda/derecha. Sin embargo, otros estudios muestran un elevado grado de consenso social sobre muchos temas importantes relacionados con la ideología política, como el estado de bienestar o las actitudes frente a la inmigración. ¿Cómo se explica esa aparente paradoja? Una posible interpretación es que las élites políticas españolas, contrariamente a lo evidenciado en otros países, están relativamente poco polarizadas en términos ideológicos: tanto su autoubicación ideológica como sus valores y actitudes en la mayoría de los temas no muestran un grado muy elevado de dispersión, generalmente menor que el de los propios ciudadanos, lo que puede haber contribuido a la generación de un consenso político superior del que cabría esperarse con una ciudadanía relativamente polarizada. Para analizar estas cuestiones se utilizan los datos de la encuesta a las élites parlamentarias españolas realizado por el Grupo Democracias y Autonomías (CIS 2.827, 2009) y se contrastan con estudios realizados a ciudadanos del propio Centro de Investigaciones Sociológicas y de la Encuesta Social Europea.