Un año después de la Presidencia española de la UE y veinticinco desde la adhesión -en el contexto de grandes cambios a consecuencia del Tratado de Lisboa, la crisis económico financiera, la ampliación a veintisiete miembros o el proceso de globalización-, parece un buen momento para realizar un doble ejercicio. Por un lado, analizar la organización, elaboración y orientación futura de la política europea de España y, por el otro, estudiar el impacto de la pertenencia sobre su sistema institucional, atendiendo tanto a la dimensión multinivel del Estado autonómico como a la de la eficacia y legitimidad de la toma de decisiones. La atención del Grupo de Trabajo se dirigirá prioritariamente a cuatro ámbitos: (i) el papel de las Cortes Generales y el supuesto reforzamiento de su hasta ahora reducida participación en el sistema; (ii) la forma cada vez más intensa, aunque no exenta de problemas, en que se insertan las Comunidades Autónomas en todo el proceso; (iii) la estructura político-administrativa existente en el gobierno central –y también en el seno de las CCAA- que realiza la coordinación interdepartamental, seleccionando y procesando las prioridades temáticas que luego se negocian en Bruselas; y (iv) los modelos de gobernanza y los procesos de definición e implementación de las políticas públicas europeizadas haciendo especial hincapié en las relaciones intergubernamentales. Las ponencias deberán cubrir siempre directa o indirectamente el caso español pero se aceptarán también trabajos comparados que incluyan otros estados miembros.