En el ámbito de las políticas sociales, la salud es una de las políticas más relevantes en la sociedad. En Chile, la atención primaria constituye el primer nivel de contacto con la ciudadanía, brindando servicios ambulatorios masivos y de complejidad básica centrados en la promoción, prevención, curación y rehabilitación de la población inscrita. La administración de la atención primaria de salud ha sido delegada a las municipalidades, órganos descentralizados del Estado. 

En esta investigación se realiza un análisis de la política de Atención Primaria de Salud tomando el caso de la Región de Biobío, empleando una triangulación de información entre la estructura institucional, las fuentes de datos institucionales relacionadas con financiamiento, cobertura y determinantes de salud, y la Encuesta a Usuarios de Atención Primaria de Salud en la región del Biobío aplicada en 2023. Esta última entrega una caracterización sociodemográfica de la población y mide la percepción de los usuarios sobre la accesibilidad, asequibilidad, admisibilidad y calidad de la atención, incluyendo la evaluación de los profesionales médicos y los tiempos de espera, así como una comparación con las expectativas previas. 

El análisis de los datos se realiza mediante técnicas univariadas y multivariadas. Entre los resultados más destacados se encuentra que la solicitud de atención se realiza principalmente de forma presencial (88%), y el 75% de los usuarios tarda menos de 15 minutos desde su lugar de residencia hasta el centro de salud. El 86% de los usuarios señala haber recibido en el servicio de atención primaria de salud una atención mejor a la que esperaba, mientras que el 70% de los usuarios evalúa el sistema con una nota superior a 6 (escala del 1 al 7), aunque solo el 17% de los centros de salud cuenta con acreditación en calidad. No obstante los resultados generales, la evaluación de los tiempos de espera es visiblemente más baja, siendo la satisfacción con el tiempo de espera para obtención de la hora de atención el peor evaluado. 

El sistema de aseguramiento predominante en la población es FONASA, que abarca al 90,2% de la población regional, siendo el 60% de estas personas con ingresos iguales o inferiores a $380,000, quienes mayoritariamente utilizan los Centros de Salud Familiar (CESFAM) para consultas médicas y exámenes. Un 38% de los usuarios experimenta algunas dificultades al momento de tener que costear los gastos de salud y un 50% de los usuarios piensa que chequearía su estado de salud más frecuentemente si contara con mayores recursos económicos. 

Esta investigación proporciona una visión integral de la política social de atención primaria de salud en la región del Biobío, donde la mayor parte de la población no tiene acceso a prestadores privados, ofreciendo datos concretos y actualizados sobre la percepción de los usuarios, los desafíos existentes y las áreas de mejora. Comprender estas dinámicas es fundamental para identificar oportunidades de intervención y perfeccionamiento en el sistema de salud descentralizado, lo que a su vez contribuye al progreso y bienestar general de la comunidad.