El actual sistema internacional hereda los más destacados problemas y dinámicas de la Guerra Fría, agravados por algunos de los efectos negativos de la globalización, con mayor complejidad y dinamismo, hasta el punto de hacerse cada vez más difícil reconocer cuál es el campo específico de lo propiamente “internacional”, modificándose los límites clásicos de los Estados. La expansión del terrorismo a nivel nacional e internacional, la consolidación de la sociedad del riesgo, la invasión de una cultura punitiva, el fenómeno de “délocalisation” de internet, se perfilan como ejes imprescindibles en el análisis de las transformaciones del Estado y la realidad jurídica y política actual. A las antiguas teorías geopolíticas deben sumársele nuevas concepciones de la esfera política global. Tal vez al concepto de “Sociedad Post-Estatal”, se una la idea del “desbordamiento de los espacios geoestatales”, y añadir la pregunta de ¿cuál es el Gobierno de la Globalización? a las que se intentará dar respuesta con esta comunicación. También ejemplos de la teoría del “linkage” entre la política internacional y la interna, los avances en el Espacio de Libertad, Seguridad y Justicia de la Unión Europea y su repercusión en los diferentes Estados, con especial atención a España. Una Gran Bretaña siempre “caballo de troya” de la estrategia USA (operando como directorio fáctico de la subalternidad europea), y las recombinaciones de alianzas o partnership entre los diversos Estados europeos según las cambiantes coyunturas. Asimismo se analiza minuciosamente la respuesta de los Estados y de la Sociedad Internacional ante estos desafíos: el “approachment tecnológico” generado en los últimos años con importantes repercusiones en la esfera de la propia intimidad (pasaportes biométricos, listas antiterroristas, bases de datos personales, Echelon, Carnivore), no sometidos a controles por parte de instancias internacionales; nuevos eufemismos (”actos de guerra asimétrica”, ”daños colaterales”, ”fuego amigo”, presos de Guantánamo). Explicarlo todo ya no lo excusa, también porque la sociedad es ya consciente que existe incertidumbre, riesgo y respuestas, en ocasiones manufacturada (los medios de comunicación, ¿”nueva forma de periodismo” vista en el activismo de Wikileaks?), abriendo el clásico dilema libertad versus seguridad en el que se encuentran involucrados importantes conceptos como razón de Estado, Soberanía,… que hasta la actualidad dependían de mediciones establecidas por los Gobiernos y la propia comunidad internacional.